Cesar Vallejos, la figura del partido junto a Germán Díaz.
El Linqueño le ganó a Juventud de Gualeguaychú 5-3 por penales y se clasificó a semifinales donde se enfrentará a Libertad de Sunchales. En los 90 minutos reglamentarios el equipo de Lincoln ganó 1-0 con gol de Germán Díaz, la figura de la cancha. El domingo vuelve Schiavi y no estarán el “Turco Ale (5 amarillas) y Maxi Antonelli expulsado
El partido comenzó confuso, muy trabado en la mitad de la cancha lo que hizo que ninguno de los dos equipos pueda tener el control del balón. Luego de los primeros 15 minutos El Linqueño intentaba atacar pero estaba muy apurado, sin ideas y sin profundidad. Esto beneficio al conjunto de Entre Ríos que jugó con un esquema claramente defensivo.
El equipo de nuestra ciudad en el apuro de encontrar el primer gol cometía graves errores defensivos y dejaba expuesto el arco defendido por Cesar el “Mono” Vallejos que tuvo una tarde memorable y confirmó su excelente momento.
Luego que Vallejos tape tres pelotas increíbles, El Linqueño tuvo su primera llegada clara en los píes de Luciano Millares que remató de sobre pique y el arquero de Gualeguaychú, Schab, la descolgó del ángulo increíblemente.
El Linqueño se empezó a animar y tuvo otra chance de abrir el marcador cuando Martín García quedó mano a mano después de un error defensivo y no pudo definir, ya que la pelota le quedó encima del cuerpo y se le quedó sin recorrido la pierna, lo que provocó que el balón salga sin fuerza a las manos de Schab.
El primer tiempo se iba cuando Andrés Alonso jugó el balón hacia atrás para que la despeje Vallejos. Este antes de pegarle al balón se lesionó el tobillo derecho y agarró la pelota con la mano adentro del área, ya que lo presionaba el delantero. El arquero lesionado y tiro libre indirecto adentro del área, todo era confusión en el Leonardo Costa.
Vallejos, luego de permanecer casi 5 minutos tirado en el suelo y con todo el esfuerzo y el corazón que lo caracteriza al ex Renato Cesarini se levantó y aguantó medio minuto mas hasta que el árbitro Santafesino Manuel Sánchez dio por terminado en primer tiempo.
El entre tiempo del partido fue muy tenso en la tribuna local, ya que no se sabía si Vallejos iba a continuar o iba a ingresar el Juvenil Claudio Staffieri de excelentes condiciones, pero sin experiencia. El equipo de juventud salió a la cancha, pero el albiazul de hacia desear y todo era murmullo en el Leonardo Costa. Varios minutos después aparecieron los jugadores dirigidos por Meske, pero la incógnita seguía, ya que salieron los 10 jugadores de campo pero no estaba el arquero. Hasta que un minuto más tarde apareció la figura de vallejos corriendo hacia el campo de juego en un acto heroico que hizo delirar a todo hinchas linqueñistas, que se unieron en un grito ensordecedor al ritmo del “Olé, olé, olé, olé… Mono, Mono”.
El segundo tiempo comenzó con un cambio de arranque -salió Barbosa, de buen partido, y entró Rosales- y nuevamente se vio un Linqueño desprolijo que iba a buscar el gol pero por instinto, sin ideas, sin profundidad, sin claridad. Juventud arrancó todavía mas tirado a la defensiva de lo que había sido el primer tiempo, solo inquietaba con alguna aparición del número 10 Iván Bonzi, que estaba más preocupado por provocar a la parcialidad linqueñista que por jugar al fútbol.
A los 29 minutos el panorama se ponía más adverso todavía cuando el delantero Antonelli fue expulsado por protestar. A esto se le suma que Alonso estaba jugando desde los 20 minutos descompuesto, ya que se le había bajado la presión.
Ya con todos los obstáculos puestos, nuevamente el león herido apareció y sacó a relucir toda su mística, cuando Germán Díaz se puso el traje de “súper héroe” y se cargó el equipo al hombro. A los 31 minutos Millares desparramó a dos defensores y le cometieron falta en la puerta del área. Díaz pidió la pelota para ejecutar un tiro libre, ya que le había quedado para su perfil y con un zurdazo espectacular que se metió en el ángulo más lejano de Schab puso el 3-3 global que obligaba al desempate de los 11 metros.
A los 34 minutos fue expulsado el medio campista de Gualeguaychú Benítez. Ya 10 contra 10 se le abrieron los espacios a Martín García que inquietaba por la banda derecha, pero sin situaciones claras. El partido se terminó y algunos ya comenzaban a recordar los fantasmas de los penales contra Desamparados de San Juan y Estudiantes de Río Cuarto. Pero esta vez la suerte estuvo del lado de El Linqueño que convirtió los 5 penales (Millares, Alonso, Ale, García y Díaz). Juventud erró el cuarto penal en los pies de Salas que la tiró por arriba del travesaño, antes habían convertido Godoy, Lencina y Garmendia.
El domingo el equipo de nuestra ciudad será anfitrión de Libertad de Sunchales que viene de candidato, ya que ganó el Apertura y Clausura.
El Linqueño le ganó a Juventud de Gualeguaychú 5-3 por penales y se clasificó a semifinales donde se enfrentará a Libertad de Sunchales. En los 90 minutos reglamentarios el equipo de Lincoln ganó 1-0 con gol de Germán Díaz, la figura de la cancha. El domingo vuelve Schiavi y no estarán el “Turco Ale (5 amarillas) y Maxi Antonelli expulsado
El partido comenzó confuso, muy trabado en la mitad de la cancha lo que hizo que ninguno de los dos equipos pueda tener el control del balón. Luego de los primeros 15 minutos El Linqueño intentaba atacar pero estaba muy apurado, sin ideas y sin profundidad. Esto beneficio al conjunto de Entre Ríos que jugó con un esquema claramente defensivo.
El equipo de nuestra ciudad en el apuro de encontrar el primer gol cometía graves errores defensivos y dejaba expuesto el arco defendido por Cesar el “Mono” Vallejos que tuvo una tarde memorable y confirmó su excelente momento.
Luego que Vallejos tape tres pelotas increíbles, El Linqueño tuvo su primera llegada clara en los píes de Luciano Millares que remató de sobre pique y el arquero de Gualeguaychú, Schab, la descolgó del ángulo increíblemente.
El Linqueño se empezó a animar y tuvo otra chance de abrir el marcador cuando Martín García quedó mano a mano después de un error defensivo y no pudo definir, ya que la pelota le quedó encima del cuerpo y se le quedó sin recorrido la pierna, lo que provocó que el balón salga sin fuerza a las manos de Schab.
El primer tiempo se iba cuando Andrés Alonso jugó el balón hacia atrás para que la despeje Vallejos. Este antes de pegarle al balón se lesionó el tobillo derecho y agarró la pelota con la mano adentro del área, ya que lo presionaba el delantero. El arquero lesionado y tiro libre indirecto adentro del área, todo era confusión en el Leonardo Costa.
Vallejos, luego de permanecer casi 5 minutos tirado en el suelo y con todo el esfuerzo y el corazón que lo caracteriza al ex Renato Cesarini se levantó y aguantó medio minuto mas hasta que el árbitro Santafesino Manuel Sánchez dio por terminado en primer tiempo.
El entre tiempo del partido fue muy tenso en la tribuna local, ya que no se sabía si Vallejos iba a continuar o iba a ingresar el Juvenil Claudio Staffieri de excelentes condiciones, pero sin experiencia. El equipo de juventud salió a la cancha, pero el albiazul de hacia desear y todo era murmullo en el Leonardo Costa. Varios minutos después aparecieron los jugadores dirigidos por Meske, pero la incógnita seguía, ya que salieron los 10 jugadores de campo pero no estaba el arquero. Hasta que un minuto más tarde apareció la figura de vallejos corriendo hacia el campo de juego en un acto heroico que hizo delirar a todo hinchas linqueñistas, que se unieron en un grito ensordecedor al ritmo del “Olé, olé, olé, olé… Mono, Mono”.
El segundo tiempo comenzó con un cambio de arranque -salió Barbosa, de buen partido, y entró Rosales- y nuevamente se vio un Linqueño desprolijo que iba a buscar el gol pero por instinto, sin ideas, sin profundidad, sin claridad. Juventud arrancó todavía mas tirado a la defensiva de lo que había sido el primer tiempo, solo inquietaba con alguna aparición del número 10 Iván Bonzi, que estaba más preocupado por provocar a la parcialidad linqueñista que por jugar al fútbol.
A los 29 minutos el panorama se ponía más adverso todavía cuando el delantero Antonelli fue expulsado por protestar. A esto se le suma que Alonso estaba jugando desde los 20 minutos descompuesto, ya que se le había bajado la presión.
Ya con todos los obstáculos puestos, nuevamente el león herido apareció y sacó a relucir toda su mística, cuando Germán Díaz se puso el traje de “súper héroe” y se cargó el equipo al hombro. A los 31 minutos Millares desparramó a dos defensores y le cometieron falta en la puerta del área. Díaz pidió la pelota para ejecutar un tiro libre, ya que le había quedado para su perfil y con un zurdazo espectacular que se metió en el ángulo más lejano de Schab puso el 3-3 global que obligaba al desempate de los 11 metros.
A los 34 minutos fue expulsado el medio campista de Gualeguaychú Benítez. Ya 10 contra 10 se le abrieron los espacios a Martín García que inquietaba por la banda derecha, pero sin situaciones claras. El partido se terminó y algunos ya comenzaban a recordar los fantasmas de los penales contra Desamparados de San Juan y Estudiantes de Río Cuarto. Pero esta vez la suerte estuvo del lado de El Linqueño que convirtió los 5 penales (Millares, Alonso, Ale, García y Díaz). Juventud erró el cuarto penal en los pies de Salas que la tiró por arriba del travesaño, antes habían convertido Godoy, Lencina y Garmendia.
El domingo el equipo de nuestra ciudad será anfitrión de Libertad de Sunchales que viene de candidato, ya que ganó el Apertura y Clausura.
