Despedida con victoria...

El Linqueño le ganó a 2-1 a Tiro Federal de Morteros con goles de Luciano Millares y Santiago Dos Reis, en la despedida del entrenador Cayetano Rodríguez.
La victoria del azul fue la primera del torneo, pero la cuestión futbolística quedó en segundo plano, más allá que los tres puntos son importantísimos.
Lo trascendental fue la despedida de un grande, porque aunque no se lo haya valorado mediaticamente, al azul se dio el gran lujo de tener a un entrenador de la talla de Rodríguez detrás de la línea de cal.
Pitazo final…Unas lagrimas para despedirse de los jugadores, manos arribas con la palma abierta para despedirse de la gente y una filarmónica de aplausos que llovieron desde la tribuna para decirle chau a Cayetano.
Y se cerró un ciclo, en donde el balance general fue bueno, aunque esto es relativo y es una opinión del Blog, cada uno sacará la suya. Pero fue una aventura que sirvió para crecer, para aprender, para ser más sapientes en ciertos sentidos.
Y ahora aparecerán los optimistas, los críticos, los oportunistas, los inteligentes, los moralistas, los que creen tener los caminos ideales, los que piensan a futuro, los que piensan solo en resultados… Bienvenidos al club de barrio, al que nos eriza la piel, al que nos hace caminar cada vez más rápido a medida que vamos llegando cada domingo a la cancha.
Aunque nunca dejó de serlo, hoy volvimos más que nunca a ser El Linqueño que funciona a pulmón, el que suda transpiración azul y blanca a rayas verticales.
Ahora solo queda, como dijo alguna vez el “Indio” Solari en alguna entrevista hace tiempo, “Ir al frente tirando la toalla”… De eso se trata, ir al frente con lo que queda (Que es todo). Ir a luchar con el corazón y alma, que no es poco y solo algunos privilegiados lo pueden hacer.